miércoles, 25 de diciembre de 2013

Los chuchos ha traicionado a la izquierda

¡¡Exijamos lo Imposible!! 
Contralínea
El Chucho Ortega apurando la contrarreforma energética


Copiando los Acuerdos de la Moncloa (cuando el fallecimiento del dictador Francisco Franco en la España neofascista y neonazi), cuentan que para apoyar la victoria a la Soriana y Monex de Peña, una noche Jesús Ortega, José Murat y los peñistas se pusieron a redactar el Pacto por México, dizque para invitar a todos los partidos políticosaunque sólo eran el Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) Chuchistaal toma y daca de concesiones con la finalidad de entregar los yacimientos petroleros de la nación operados por Petróleos Mexicanos (Pemex) y la generación eléctrica a los inversionistas nativos, a los empresarios panistas y sobre todo a las inversiones estadunidenses, que desde su campaña pactaron con Peña esa apertura, recibiendo, a cambio, el apoyo de Washington.

Los 85 acuerdos del Pacto, que resultó ser el Pacto por Peña, fueron para abrir la venta de Pemex a los mejores postores. Los Chuchos Zambrano y Ortega, con el tal Murat, han sido los más entreguistas, capaces de vender sus almasque ya empeñaron a cambio de ser aceptados por el peñismo–, para entregar el territorio mexicano (sin mexicanos) a los estadunidenses. Recibiendo a cambio, claro, su recompensa, que al fin y al cabo, son unos políticos rufianes de cañerías.
Para seguir conspirando en lo oscurito cómo privatizar el patrimonio de la nación y escupir sobre las tumbas de Cárdenas del Río y López Mateos que afianzaron la proeza energética nacionalizando el petróleo y la energía eléctrica, en vísperas de que se presentara la contrarreforma petrolera, se reunieron en sínodo nocturno el 5 de diciembre pasado, los vendepatrias desnacionalizados que están detrás de la próxima traición a la patria. Con esto, los chuchistas cumplirán las promesas que hicieron a Peña a cambio, pues, de concesiones. Fabiola Martínez y José Antonio Román (La Jornada 6 de diciembre de 2013), nos cuentan que Chucho Ortega se reunió con César Camacho, presidente del PRI y con Gustavo Madero, el dictador del PAN, más el representante de Peña, Aurelio Nuño, Santiago Creel y Alejandro Zapata, para ver cómo maniobrarían en la privatización petrolera. Obviamente Chucho Ortega llevaba la representación de su cómplice Chucho Zambrano, quien cuidaba la retaguardia del perredismo chuchista, creyendo que engañan al perredismo cardenista para encontrarle la cuadratura al círculo de la entrega de Pemex y ejecutar la contraexpropiación.
Chucho Ortega ha traicionado a la izquierda, ya que siempre ha sido un derechista con tendencias panistas infiltrado en el PRD; igual que Graco Ramírez o el camaleónico Mancera. Por eso se le facilitó pactar con el peñismo para privatizar el petróleo. Es un politiquillo marrullero que al ver la oportunidad de subirse al tranvía peñista no dudó en hacerlo ofreciendo una copia de los Acuerdos de la Moncloa al mexiquense, quien de inmediato vio cómo obtener el botín de Pemex; y en lugar de limpiar a la empresa sacando a los Romero Deschamps y demás buitres, optó por entregar el oro negro a Washington, con la firma de Chucho Ortega, el PAN y el priísmo peñista. Mientras, el volcán social del repudio sigue a punto de estallar. El Chuchismo de Ortega sigue en el asunto tenebroso del Pacto por Peña
*Periodista

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