Por Esto!
A los traidores nadie los respeta
María Teresa Jardí
La OCDE ha denunciado, por estos días, el último lugar que ocupa México en prácticamente todo. Es el único país de esa organización que pierde bosques y selvas y se alza como el lugar donde más secuestros se cometen, dentro del rango de todos los países del mundo, no sólo de los privilegiados a los que México jamás debió pertenecer, porque un país con cincuenta millones de miserables, con una escandalosa educación escolarizada que hasta a iletrados productos televisivos pueden sentar los poderes fácticos en la silla comprada para el Ejecutivo federal, convirtiendo en fachada de opereta a los Peña, mientras los Videgaray actúan como gerentes de los mafiosos empresarios y los “legisladores” con “obscenidad sin maquillaje” concretizan la entrega de los bienes de la antaño nación soberana que ni es ya república ni país independiente.
México, es claro hoy que fue admitido como miembro de la OCDE con la promesa de Salinas de que se convertiría en patio trasero del imperio yanqui. Organización a la que ya le pesa México como miembro y de ahí las declaraciones ubicándolo en el último lugar en todo, una vez convertido en patio trasero con administradores lacayos del gobierno gringo y al servicio de los grandes capitales nacionales y transnacionales.
México, ya no tiene nada que hacer con los otros poderosos países que rigen los destinos del mundo. Por eso exhiben al que se sintiera “socio” de pleno derecho para, que se vayan haciendo a la idea de lo que México es hoy y no vayan a pensar, ni los Salinas ni los Peña, pasando por los Zedillo, Fox y Calderón, que por haber cumplido el sueño largamente programado por los gringos, no son también despreciados, por el imperio y por las empresas transnacionales a las que han hecho la entrega del país, como los traidores a su pueblo que son.
Mintiendo y deseducando al pueblo mexicano, sometiéndolo a base de generar el miedo incluso con Kibiles, entrenados por los gringos, cortadores de cabezas, a los que se les abrieron las puertas de México, por Calderón, cuando empezaban a no tener cabida en Guatemala, porque aun los más atrasados y golpeados pueblos de la tierra, se cansan y amenazan con poner límites, que de tanto en tanto tienen que ser guardados, para poder mantener adormecidos y estupidizados a los pueblos con el “ahora sí las cosas por fin van a cambiar”, aunque nada cambie, como queda claro.
Más allá de que aquí no haya delito grave en el que no aparezcan involucrados policías, marinos y militares. No hay país donde funcionan los encargados de perseguir los delitos que se llene de grupos criminales, sin que desde adentro, de los que controlan el poder, no hayan sido permitidos e incluso, en el caso mexicano, creados y promovidos.
Los vacíos aquí se han ido dejando de manera programada por los reales delincuentes que desde dentro del poder han fomentado el crecimiento de los de “fuera” y, a muchos, de esos grupos criminales, convertidos al lado de Televisa, también en poderes de facto, me dejaría cortar el cuello y no lo perdería, controlan desde dentro.
Lo de Michoacán es clara evidencia de lo que digo. Tomado por el ejército paramilitar de García Luna en la época de Calderón y hoy, en la de Peña, además por los militares, y los mismos paramilitares de García Luna que hoy se escudan tras la Gendarmería que Mondragón dirige, no pueden controlar ni a los Templarios ni a la Familia y dicen que se les “acaba de presentar” otro grupo de mafiosos llegado de Jalisco. Ja. Como si por generación espontánea brotaran esos grupos, como las malas yerbas lo hacen con la lluvia.
Todo es una farsa canalla que tiene años aplicándose en este país condenado al regreso de la esclavitud y de la represión para imponerla, que se concretizará en el 2014 de la era prianista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario