sábado, 23 de mayo de 2015

Cómo confiar en un pendejo racista

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Por Esto!

No mames”
Ricardo Andrade Jardí

Con el intento de hacer hermenéutica de la llamada “filtrada” del Consejero Presidente del malogrado y defenestrado INE, que arroja un deplorable imaginario que por el nivel de vocabulario da miedo por la mediocridad que demuestra, tendría que ser el país entero el que dijera “no mames”.

Cómo es posible que un junior lacayo, como ése, pueda ser consejero presidente de un organismo que pretendió ser ciudadano; cómo confiar en un imbécil racista, lo que implica por supuesto una enorme ignorancia y, por lo tanto, también una profunda intolerancia para garantizar lo que ya de entrada con el audio de esa llamada es evidente que no será garantizado. No mames”, cómo puede este país llegar al punto donde los ignorantes y serviles juniors se sienten lo que nunca han sido ni serán frente a los pueblos indígenas originarios de este tan mal tratado país. En un país donde la cosa esta que revienta, ante un Ejecutivo dedicado a administrar los intereses perversamente corruptos de la telecracia y las transnacionales, en tanto el narcoestado ocupa con toda su violencia los vacíos políticos y económicos que la partidocracia, en su vanidad sin fin, abandonó, no sin antes imponer reglas inequitativas que garanticen la perpetuidad de los corruptos y obstaculicen la lucha burguesa por el poder de forma “pacifica” de ciudadanos y organizaciones no partidistas, de candidaturas no sometidas a la corrupción que la dictadura perfecta nos impone en nombre de una democracia del “no mames”.

Lorenzo Córdova, en un país decente, amén de un verdadero proceso de búsqueda y construcción democrática, tendría que renunciar sin más. Pero Lorenzo Córdova no es un personaje decente, como no lo es el México prianista del Siglo XXI, lo que la “filtrada” llamada demuestra. Ni es el consejero del INE un personaje con moral ética. Córdova es un lacayo vil, con pretensión de “hombre blanco” seudoconquistador, de los intereses más perversos de los poderes fácticos. Y se puede decir que después de la llamada “filtrada” será claro para el mundo que no es más que un, aunque le duela en el alma, corrupto (en su acepción más amplia) mexicano más de la pandilla cromosómica del PRIAN.

 El consejero del “no mames” está en el INE para legalizar toda la ilegalidad de un proceso electoral en el que sólo los imbéciles y los ciegos siguen creyendo.

 Pero aún así, ese enano de la política está moralmente obligado a renunciar inmediatamente a su rentable puesto de “consejero ciudadano”, que de ciudadano no tiene nada, ya que cretinos racistas como ése no pueden ni son representantes de la ciudadanía. Si acaso son representantes de la familia Gonzáles Torres y su partiducho similar de porquería, hoy conveniente tribuna electoral de la telebasura.

 Los intentos del “no mames” consejero para suponerse indignado y denunciar la ilegalidad de la grabación telefónica, hecha pública (sin olvidar que el propio Córdova es un promotor y defensor de la ley que permite el espionaje telefónico), son una mera cortina de humo en un país donde la política, de la hamburcolademocracia de mercado, desde hace varios años se hace de video escándalo, en video escándalo, legalizados por el PRIAN, Televisa, el exIFE y el CCE, para desprestigiar a los oponentes políticos que no pueden comprar. No es el caso del junior “no mames”, pues la llamada misma, por más ilegal que sea su “filtración”, no hace ilegal su contenido y al contrario, demuestra que una elección presidida por un imbécil de esa calaña no tiene ninguna posibilidad de dar certeza ni legitimidad a los procesos electorales en México.

 Lo que impulsa con más fuerza el urgente debate sobre las formas de la democracia y de la posibilidad cada día más viable para el país de caminar a una democracia participativa, que ignore y destierre la maldita idea de la representatividad. Representatividad que sólo sirve para enriquecer a políticos corruptos y despojar a la sociedad de una política ciudadana que permita un devenir menos siniestro, que el que hoy la telecracia y el narcoestado, con todos sus lacayos “no mames”, nos imponen...

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